A mí en particular me fascinaro sus manos, desde la primer caricia, blancas y grandes, pulcras, para nada tersas, ya me sé el sonido de sus caricias en mi piel, me encanta como raspan, como hablan, cuando me acaricia es como una bella melodía en mi sentir...

He padecido el desamor, la indiferencia, y, sí, lo confieso se siente morir, pero sentir arrepentimiento, eso no se compara, es de los peores sentimientos, ya no soy yo, ya no se quién y por qué soy, ¿que soy?, ¿qué hice? es la pregunta que me tortura todas las noches antes de dormir, y, dormida en sueños, y despierta en murmullos, cuando camino por la calle, y, a veces siento que la gente que me ve pasar me pregunta ¿qué hiciste?, es dormirse entre polillas de arrepentimiento y amanecer carcomida....

Estoy destilando tinta, trazando mi dolor en letras, en lo único que se hacer, escribir. Porque hablar no se me da, no tengo con quién, no tengo para qué, y además por qué, nadie va a comprender lo que siento, ni siquiera yo lo hago, y estoy tan harta, justo estaba riéndome a carcajadas, y ese pinche dolorsito, empezó otra vez, como para recordarme, que no se me olvide lo hija de puta que he sido.

Te digo: NO, y lo digo en serio, pero esa mirada verdeoscura me subyuga, pero qué necesidad de avasallar, amor anda besame ya, que me niego, me niego...
Mi corazón es vasto para ti y tú virilidad, !ay¡ que me niego, !ay¡ que me tienes, !ay¡ amor de mis penumbras, de mis quimeras, de mi vida, de mi vida, !ay¡ que te estoy amando ya, ya y desde siempre...

Puedo escribirte cuentos, novelas y poemas, todos abstractos, metafóricos, textos quizá brillantes o terribles, puedo, pero lo único que tengo para decirte amor, es que te amo....